Según avanzaba el ciclo de cultivo, la temperatura y la radiación externa fueron disminuyendo, por lo que el 14 de septiembre se realizó un leve lavado del plástico, esta práctica aumentó la transmisividad del la cubierta en un 5- 40 %. Debido a que la temperatura y la radiación externa fueron disminuyendo, al avanzar el ciclo de cultivo, el 14 de septiembre se realizó una leve limpieza del plástico, con el consiguiente aumento en el porcentaje de transmisividad del encalado (transmisividad del plástico lavado de 35-40 %). Como consecuencia de este primer lavado, el comportamiento de los tres sistemas de sombreo fue más homogéneo, aunque se apreció una gran influencia de las condiciones ambientales redundando en una gran variabilidad entre días.